A este paso no va a dejar títere con cabeza y es que el entrenador del Real Madrid sale a bronca por partido con alguno de sus jugadores. Empezó con Sergio Ramos, le siguió Benzema, el penúltimo fue Pedro León y ahora le ha llegado el turno a Mesut Ozil. ¿El motivo? No se entienden.El alemán había sido la sensación en los primeros partidos de Liga del Real Madrid, le bautizaron como el antigaláctico, y la decisión de dejarle en el banquillo de inicio ante el Auxerre sorprendió a casi todos. Sólo se podía justificar por la intención de Moruinho de sacar toda la artillería que tenía en el banquillo y reforzar también con tres jugadores de corte defensivo el centro del campo madridista, pero nada más lejos de la realidad. El verdadero motivo de la suplencia del alemán es por motivos lingüísticos: ni Mourinho, que comenzó su carrera como traductor de Bobby Robson, consigue que el futbolista le entienda ni el jugador hace por entender a su técnico y eso que dicen que el lenguaje del fútbol es universal.
Dejando al margen las polémicas con Mourinho, el entrenador del Real Madrid se mostró satisfecho por la victoria de su equipo en Francia y aseguró que merecieron ganar el partido pese a las pocas oportunidades de gol que originó. "Ante el Mallorca y el Levante creamos quince ocasiones de gol, no marcamos y empatamos a cero. Todo el mundo dijo que no merecimos ganar porque no marcamos. Hoy, lo merecimos porque hemos marcado", sentenció el portugués.
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